Que nos importa crear en el mundo
Vivimos en una época que el filósofo Heidegger denominó “tecnológica”. Y no se refería a la tecnología que usamos hoy sino al estado mental en el que “todo se considera como materia prima a utilizar, incluidos los seres humanos”. En este marco de pensamiento no hay posibilidades de entrar en un marco inspirador pues las personas son consideradas “recursos humanos” que se utilizan para producir resultados. Lo que las ha convertido en unidades de producción, separadas de “eso” que las mueve a conseguir grandes logros: su potencial, su compromiso y la intensión de crear impacto y sentido en el mundo.
Esto ha producido una gran desconexión en nuestro mundo organizacional mostrando indicadores como el que Gallup trae anualmente, y que el año pasado mostró que el 66% de las personas se encuentra desconectada de su trabajo*. El sentirnos vacíos de significado, desconectados de nuestras acciones y de los demás, no vistos o tenidos en cuenta, presionados en un proceso de comando y control, hace que los resultados de las organizaciones bajen considerablemente porque los empleados viven contraídos y no conectados con lo que les importa cuidar y le da sentido a lo que hacen. El modelo de liderazgo tradicional ha enceguecido a las organizaciones y las ha dejado con la necesidad de tener empleados comprometidos, pero sin las habilidades en dueños, ejecutivos y líderes para poder generarlo.
La promesa del liderazgo generativo es desarrollar habilidades conversacionales y de ejecución en dueños, ejecutivos y líderes para crear equipos productivos y eficientes. Le da a los líderes la capacidad de recuperar el mundo de la coordinación de acciones eficientes y los resultados, como un espacio construido por la interacción del equipo, y lograr, de manera colaborativa y participativa, crear el futuro deseado. Un futuro para producir valor, satisfacción y significado para ellos mismos y los demás.
El recuperar el compromiso de los seres humanos de su equipo, y no verlos como unidades de producción, le permitirá al líder subir su nivel de liderazgo y la excelencia en los resultados de su equipo. Porque como seres humanos ponemos nuestra intención y compromiso en aquellas acciones y resultados que nos dan sentido, que nos conectan, nos alinean y nos permiten manifestar y cuidar aquellas promesas donde podemos prosperar.
Lo que hemos encontrado es que los líderes, equipos, organizaciones y comunidades producen mejores resultados externos cuando los seres humanos se sientes seguros y sanos para crear juntos el futuro que los inspira, a través de espacios de conversaciones estructuradas y recurrentes.
En 40 años, el Instituto de Liderazgo Generativo ha producido afirmaciones con cientos de líderes, dueños de empresa y ejecutivos que han logrado incrementar su facturación, rentabilidad, eficiencia en costos y ventas, gracias a que obtienen altos niveles de aceptación de sus líderes y a la credibilidad del futuro que sus ejecutivos están creando con los equipos y las organizaciones